| 
	 DATOS DE ENMARQUE: Noticias sobre Canarias. Edad  Antigua: Homero,  poeta griego, vive en el siglo IX antes de  Cristo;Platón, filósofo,  en el siglo V a. de C.; Juba,  Rey de Mauritania, unos cuarenta años antes de Cristo. Plinio, naturalista romano, en el siglo I de la Era Cristiana. Edad Media: Los  viajes más  frecuentes a las Islas ocurren desde el siglo XIII hasta la Conquista, a  principios del XV por genoveses, mallorquines, catalanes..., grandes  comerciantes de la época. 
	 | 
	 
	 
	NOTICIAS DE LA ANTIGÜEDAD 
	Uno de los muchos problemas de la historia de  Canarias reside en saber si el mundo antiguo tenía conocimiento de la  existencia de las islas. Sobre este tema, historiadores y estudiosos han  expuesto las más variadas hipótesis, unas coincidentes y otras divergentes. 
		 Según el estado actual de los conocimientos,  parece cierto que los antiguos tenían noticias de las Canarias, aunque  de una forma confusa   
 
 
		 
		 
		  
		  		 
		 ÉPOCA DE LA GRECIA ANTIGUA 
		 Los textos de Homero y Hesíodo nos  hablan acerca de unas islas que colocaban más allá de las Columnas de Hércules  (Estrecho de Gibraltar), a las que aludían con el nombre de Hespérides o  Campos Elíseos. Estas islas eran consideradas como una especie de paraíso  terrenal, noción muy ligada a la mitología griega. 
		 La leyenda de la Atlántida nos narra  la existencia de un continente situado también más allá de las Columnas de  Hércules, y que un cataclismo de enormes proporciones lo sepultó en el  océano. En el Timeo, libro de Platón, se lee que varios sacerdotes  egipcios conversan con Solón sobre la situación de la Atlántida, localizándola en  la posición mencionada. Algunas interpretaciones posteriores sobre la Atlántida  nos dicen que las Canarias son los restos que afloran de aquel desaparecido  continente. 
		 Existen  hipótesis de que los fenicios, en  su diáspora comercial, pudieron llegar hasta estas islas atlánticas; sin  embargo, no hay ninguna huella arqueológica que lo testifique. 
		 También se ha especulado con la posibilidad  de que naves tartesas, pueblo de la baja Andalucía, llegasen hasta aquí  en el siglo V a.C., pero no dejan de ser simples conjeturas. 
		 
           
               | 
            
           
             | Nave Griega. El mundo antiguo tenía noticias de  Canarias. | 
			 Nave romana. En los escritos de varios tratadistas  romanos se hace alusión a las islas afortunadas. | 
            
          
		  Volver Arriba 
		 
		  
		  		 
		 ÉPOCA ROMANA 
		 Las noticias que nos llegan de la época  romana se fundamentan en los libros de Plinio, un eminente naturalista romano que vivió en el siglo I de nuestra era. En  sus textos, las Islas aparecen con el nombre de Afortunadas. 
		 Cuenta el escritor romano que un general  cartaginés, llamado Hannón, atravesó el Estrecho de Gibraltar y navegó,  costeando África, hasta un punto que algunos suponen el actual Senegal. Después  de capturar varios esclavos, entre ellos algunas mujeres, regresaron a su  patria, y que en su ruta divisaron una montaña blanca, muy alta, que se piensa  fuese el Teide. 
		 Por otras fuentes, se conoce que Sertorio,  general romano proscrito en Hispania, acarició el proyecto, aunque no llegó a  realizarlo, de viajar hasta las islas atlánticas, de cuya existencia se enteró  por unos marinos. 
		 Otra noticia que nos  ha llegado a través de Plinio habla del rey Juba de la Mauritania, quien  envió una expedición a las Afortunadas. Al regreso, le llevaron dos grandes  perros, de aquí la atribución que se ha hecho el nombre de Canarias (del latín canis–is=perro).  Sin embargo, las investigaciones actuales se decantan porque el nombre del  Archipiélago proviene de la tribu CANARII, una de las sociedades del mosaico  étnico berebere del Norte africano, origen de los pobladores más antiguos de  las Islas. 
		 Juba, con las noticias que los marinos le  aportaron, escribió una relación de la que Plinio extrajo, entre otras  cosas, esta somera descripción de las islas:   
		 «La primera, llamada Ombrios,  no ofrece vestigio alguno de edificios, tiene en sus montañas una laguna y  árboles semejantes a cañahejas de los cuales se extrae un licor amargo en los  que aparecen de color negro y agradable al paladar en los que tienen el color  blanco. Llámese otra isla Junonia, y en ella se ve un pequeño templo de  piedra. Junto a ésta hay otra del mismo nombre, pero de menores dimensiones.  Viene en seguida Capraria, poblada de grandes lagartos, y a la vista de  ambas se alza Nivaria, que lleva este nombre por sus nieblas y perpetua  nieve. Sigue luego Canaria, llamada así por sus perros de gran tamaño de  los que fueron enviados dos a Juba». 
		 Resulta difícil identificar cada una de las islas, a tenor de los datos  un tanto confusos que aparecen en el texto de Plinio. No obstante algunos  autores establecen la siguiente relación: Ombrios=El Hierro o La Palma; Junonia=Fuerteventura,  aunque otros la asimilan a La Gomera; Capraria=Lanzarote; Nivaria=Tenerife  y Canaria=Gran Canaria.   
		 
           
               | 
            
           
             | Mapa atribuido a Sebastián Munster, 1550, realizado según las interpretaciones de Ptolomeo en el siglo  II d.C. (MHT) | 
            
          
		  Volver Arriba
  |