En los Silos como en el resto de la Comarca, existe, a nivel general, un diálogo sostenible entre el hombre y el medio natural, en la medida que no tienen lugar grandes afecciones al medioambiente, el cual se halla notablemente conservado a partir de los 400 metros, allí donde el descenso de la población es directamente proporcional a las mayores extensiones de espacio natural protegido. No cabe duda de que dentro de los logros sobresale la existencia del Parque Rural de Teno, así como el Monte del Agua, además del Paisaje Protegido de la Culata y el Sitio de Interés Científico Interián, los cuales contienen asociaciones vegetales del piso basal, el bosque termófilo, el fayal-brezal y la laurisilva, además del singular ecosistema lacustre que constituye las Charcas de Erjos.
Por su parte, el mayor problema existente es quizá el derivado de la actividad extractiva que fue practicada en el pasado para la creación de urbanizaciones. Ello trajo consigo la presencia de las Charcas de Erjos, las cuales, en última instancia, se han convertido en uno de los espacios de mayor interés natural dentro del municipio, pero también supuso una pérdida de suelos que en la actualidad no se pueden recuperar. Finalmente, de cara al futuro habría que ver de qué manera afectará la construcción del anillo insular y hasta qué punto provocará afecciones a los espacios protegidos en el territorio sobre el que se asientan. No cabe duda de que esta nueva ordenación del espacio articulará las comunicaciones del toda la Comarca y que generará un impacto en los flujos de comunicaciones y el paisaje silense.
Fabio Correa
|